La rosca del panadero

Conozco bien tus manos,
amasadoras del tiempo, proletarias de historias,
dirigentes de los tragos de pulque
cuando llega el final de tu jornada.
Conozco los caminos gestados en nuestras palmas,
trazados y ofrendados con tragos de plusvalor,
compartidos en ritual pagano
hace veintitrés años.

Conozco la nostalgia que adviene
cuando el bule se vacía al poner el último acitrón,
cuando sopeo mi pedazo de rosca
y sin saberlo, sin quererlo, ahogo al niño.

Fotografía: ‘La rosca del panadero’, Miguel Juárez Figueroa, 2011